Un ejemplo de los proyectos de alto impacto como el abajo mostrado en la imagen, nos demuestra que en Bocas del Toro se está dando un despojo generacional y se están produciendo daños ambientales significativos. No creemos en la disneylandización de nuestro país. Eso provoca a mediano y largo plazo más daños que beneficios, excepto para unos cuantos. En el contexto general y económico el país pierde no sólo recursos naturales únicos, sino que pierde cultura y valores que es lo que nos identifica y hace conservar nuestras raíces.
Si nada de lo que decimos arriba importa como panameños, entonces que vendan cada pedazo o metro cuadrado de este país al mejor postor, para que la "riqueza" y el "confort" nos resuelva el estrés a todos. Usted decide.
En países más visionarios que el nuestro, se han permitido un número limitado de proyectos en las costas de playas, pero por lo menos han intentado defender el patrimonio de su país, impidiendo que extranjeros compren las tierras. O sea, se está haciendo turismo realmente sostenible y no se pierde ni el recurso, ni la cultura, ni las propiedades de la nación y sus ciudadanos. Ni siquiera se permite la concesión. Se permite el alquiler del recurso o área.
En Panamá, Martín Torrijos y Rubén Blades han decidido vender el país en función de sus propios intereses y no los intereses a largo plazo de la nación. Esto es tan inaudito y anti-ético que todavía están a tiempo de emrumbarse para que no queden marcados en la historia como unos vendedores del País.
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José González
Crítica en Línea -- 25 de abril de 2006
Proyecto Residencial de Alto Costo --Proyecto Sunset Point--. (Foto: Ilustrativa /BDP)
Los ataques contra empresarios e inversionistas en la provincia de Bocas del Toro, a través de acciones penales, forman parte de una serie de medidas que buscan bloquear el desarrollo de proyectos turísticos en esta región del atlántico.
Tales denuncias fueron hechas por el abogado Darío Carrillo Gomila, quien reveló que grupos organizados han interpuesto acciones con la intención de desconocer los derechos posesorios en Bocas del Toro y despojar a sus legítimos propietarios de los terrenos.
Según Carrillo, el pasado 7 de enero de 2006, la Asamblea Nacional, aprobó la ley 2 a través de la cual se regularon las concesiones para la enajenación de territorio insular con fines de aprovechamiento turístico y se dictaron otras disposiciones.
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ESTA LEY A PESAR DE TODO LO NEFASTA QUE ES, TAMPOCO DA LUZ VERDE AUTOMÁTICA COMO PRETENDE HACER VER EL ABOGADO CARRILLO. SI NO EXISTE LA CONCESIÓN O VENTA DEBIDAMENTE PROCESADA PARA UN PROYECTO TURÍSTICO --QUE NO LOS SON LOS RESIDENCIALES--NO PUEDEN INVOCAR ESTA LEY.
ESTE MISMO SITIO DISCUTE POR QUÉ LOS PROYECTOS RESIDENCIALES INMOBILIARIOS NO SON, NI DEBEN SER CONSIDERADOS BAJO EL PARAGUAS DE PROYECTOS TURÍSTICOS. SABEMOS QUE ESTO LLEGARÁ A LA CORTE POR LOS ABUSOS Y LAS EXONERACIONES QUE NO DEBEN SER PERMITIDAS. A ESTOS SEÑORES NO LES BASTA VENDER CADA METRO CUADRADO DE ESTE PAÍS, SINO QUE PARA COLMO, SE LES EXONERA DEL PAGO DE IMPUESTOS!
POR ESO ES QUE SOMOS UN PAÍS LIMITADO DE RECURSOS. TODO MUNDO QUIERE LOS RECURSOS DEL PAÍS A CAMBIO DE NADA. TREMENDO NEGOCIADO!
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